Muchas gracias a la Genealogical Society of Ireland, 2025
Muchas gracias a la Genealogical Society of Ireland y a su Board por este honor y confianza renovada.

Muchas gracias a la Genealogical Society of Ireland, 2025
Muchas gracias a la Genealogical Society of Ireland y a su Board por este honor y confianza renovada.
Desde hace años, quienes publicamos contenido en la web
convivimos con los evangelios de Google para webmasters:
primero fue el sitemap.xml
,
luego la obsesión por la meta description
,
después vinieron las keywords
, los datos estructurados, y
ahora es el turno de las canonicals.
Search Console lanza su advertencia:
"Duplicada: el usuario no ha indicado ninguna versión canónica".
¿Y qué significa esto? Que si varias páginas tienen contenido similar o compartido, Google necesita que le indiquemos cuál es "la verdadera", "la que debe ser indexada", la canónica. Es un planteamiento perfectamente válido... si todas las webs fuesen wikipédicas, jerárquicas y dogmáticamente estructuradas.
Pero no todos los sitios web están construidos así. Algunos son más vivos, dinámicos, relacionales, personales. Sitios donde cada entrada no está encapsulada como un catecismo, sino entretejida en narrativas que evolucionan, se cruzan y dialogan entre sí y cambian. En estos casos, ninguna página es canónica, porque todas son parte de un mismo flujo creativo.
Google, con toda su inteligencia artificial, sigue necesitando que los humanos, que los webmasters, le den el contenido "mascado", organizado y etiquetado según su catecismo técnico. Y si no lo haces, tu contenido puede ser ignorado, o incluso penalizado.
¿Mi solución? No siempre es rendirse al dictado. Hay ocasiones en que no hay una página principal, porque el contenido se organiza según criterios estéticos, temáticos o incluso aleatorios. Porque un post aparece en una cronología, pero también en varias categorías, y se entrelaza con otros. Porque esto no es un repositorio técnico, sino una obra viva.
No todos los sitios web son catecismos, ni todos los creadores buscan evangelizar a los bots. Algunos hacemos sitios optimizados para lectores humanos, no para robots de indexación. Y en un mundo en el que las personas ya no preguntan sólo a Google, sino también a las IAs, ¿de qué sirve tanta devoción canónica?
Mi consejo final es simple:
haz contenido con alma, dirigido a las personas que te leen.
Que Google lo entienda... o que se lo trabaje.
Como Heraldo Honorario de la Sociedad Genealógica de Irlanda, he tenido el honor de ser el anfitrión de la Conferencia Anual de Heráldica de Irlanda, impartida por impartida por Ralf Hartemink, MSc, PhD, fundador y propietario de Heraldry of the World.
Rotar un rectángulo para inscribirlo en un cuadrado ha revelado un fenómeno llamativo: cuatro modelos de Inteligencia Artificial (IA), Claude, Gemini, DeepSeek y ChatGPT, no solo fallaron, sino que cada uno propuso una solución de rotación distinta (52,77°, 49,47°, 37,26° y 37,57° respectivamente), demostrando que el error no fue sistemático. Y sólo uno acertó, Manus con su 45º exactos.
Esta disparidad sugiere la existencia de algoritmos internos diferentes y/o distintas fuentes de datos de entrenamiento o del peso entre ellas, lo que contradice el rumor de que unos modelos han copiado a otros. Por ejemplo, aunque la diferencia entre DeepSeek (37,26°) y ChatGPT (37,57°) es mínima (0,31°), sus enfoques son radicalmente distintos: DeepSeek usa una solución analítica simplificada, mientras que ChatGPT busca una solución exacta resolviendo numéricamente.
De este mal resultado, cabría achacarme la culpa argumentando que formulé mal la pregunta o que no sé crear prompts adecuados, que es, en cierta forma, lo que intentó Gemini para autoexculparse. Sin embargo, si ese fuera el caso: todos los modelos habrían dado respuestas erróneas similares, o varios habrían coincidido en el mismo error, y Manus no habría encontrado la solución correcta. Por tanto, en este caso, un error en mi prompt no explica la divergencia observada.
Yo, como humano, tengo que reconocer que la solución de 45° la obtuve a la primera por una mezcla de práctica geométrica e intuición, el llamado conocimiento superficial; pero si ahora me encerrara en una habitación con lápiz y papel para deducirlo, lo haría, aunque tardaría, es un conocimiento profundo que sé que está ahí, pero que tarda en emerger.
Que uno solo de estos 5 modelos acierte no invalida el potencial de las IA, pero sí expone la importancia de verificar sus resultados con pensamiento crítico y recordar que, a menudo, la elegancia de una solución reside en su simplicidad.
A diferencia de otros paradigmas de representación del conocimiento (como los sistemas basados en reglas o la búsqueda heurística), las redes neuronales adolecen de una opacidad intrínseca: Sus errores y comportamientos anómalos son notablemente difíciles de rastrear, interpretar y no son capaces de autoexplicarse ni de identificar el origen de sus divergencias (como ha ocurrido en este caso), lo que complica su depuración. Esta limitación, vinculada a su naturaleza estadística y de caja negra, supone un grave problema en aplicaciones donde la transparencia es esencial, por ejemplo, en el diagnóstico médico o en la aplicación de la Justicia.
En los últimos meses, plataformas como Facebook, en la que tengo dos cuentas e Instagram han lanzado servicios de suscripción para ofrecer verificación de identidad, insignias azules, atención prioritaria y dicen que mayor protección contra la suplantación de perfiles. En teoría, esto responde a una necesidad real: proteger la identidad digital. En la práctica, es otra forma de monetizar una debilidad estructural de ellos que deberían haber resuelto hace años. Veamos los números del caso de Meta, verificar una cuenta cuesta 200 euros al año (16,99 € al mes si se hace desde la app). Pero la verificación es por red y por cuenta. En mi caso, tengo dos cuentas en Facebook (con nombres distintos) y una en Instagram. Unificarlas no es sencillo, y verificar las 3 implicaría 3 x 200 = 600 euros al año. Y eso, solo para evitar que otros se hagan pasar por mí por las propias deficiencias de Meta.
Pero esto no termina aquí. Si otras plataformas pusieran precios similares a los de Meta y si tuviera que pagar aquellas donde también tengo presencia (Blue sky, Discord, LinkedIn donde tengo dos cuentas, Minds, Patreon, Pinterest, Pixiv, Reddit, Spotify, Telegram, Tiktok, Whatsapp, X, YouTube,...), y en algunas de ellas con dos cuentas, la cifra se dispara: 15 redes x 200 euros = 3.000 euros al año.
La paradoja es brutal, cuanto más activo eres en la red, más visible te vuelves, y por tanto más vulnerable a la suplantación... y más tienes que pagar para proteger tu identidad. Lo que debería ser una garantía mínima de seguridad, que nadie pueda hacerse pasar por ti, se convierte en un lujo anual que tienes que pagar.
La verificación de identidad debería ser interoperable, unificada y sin coste para el usuario común. No deberíamos tener que suscribirnos a cada red solo para no desaparecer entre clones o imitadores. Esto es: no se trata de pagar para destacar o tener más funciones, sino simplemente para que otros no usen tu nombre, tu foto o tu identidad para hacerse pasar por ti. Hemos pasado de una economía de la atención a una economía de la autenticidad: si quieres que sepan que eres tú, paga.
Y lo más preocupante: esto apenas está empezando.
La revista Cuadernos de Ayala, órgano oficial de la Federación Española de Genealogía, Heráldica y Ciencias Históricas, ha publicado una reseña de mi libro «Interpretación de seis blasones gentilicios de las Indias meridionales concedidos entre 1538 y 1540», en su número 101 correspondiente al primer trimestre de 2024.
En la reseña aparece ilustrada con la portada de mi obra y destaca la calidad del análisis heráldico y la originalidad del enfoque.
Lanzamiento en pruebas del nuevo sitio web de la Genealogical Society of Ireland, algunas secciones siguen en construcción, pero la mayoría ya están disponibles. Consulta las secciones National Heraldic Project, Heraldry Ireland y Vexillology Ireland.
El nuevo sitio ha sido creado por Pedro Antonio Torres Vera de AV Web Shield – Web Design & Cybersecurity Solutions, con sede en Quito, Ecuador.
Las versiones originales del escudo de armas y la insignia del GSI fueron pintadas por Philip Mackey de la Oficina del Heraldo Jefe de Irlanda en 2001.
Un incidente sacude una oficina, dejando a los empleados desconcertados. Resolverlo no requiere más que lógica, pero ¿qué sucede cuando ponemos a prueba a cinco de las inteligencias artificiales generativas más avanzadas? DeepSeek, ChatGPT, Claude, Gemini y Venice.ai se enfrentan para medir su capacidad de análisis y deducción.
Este no es un experimento perfecto, pero sí una oportunidad única para ver cómo cada IA maneja el mismo problema. Mientras algunas responden con agilidad, otras titubean, piden ayuda o no llegan a una conclusión clara. ¿Cuál de ellas demostró ser la más competente? No es solo una cuestión de velocidad o claridad en las respuestas; en este caso, lo que realmente importa es quién logra encontrar la respuesta.
Y sí, hay un ranking, pero antes de llegar a él, vale la pena descubrir cómo cada una intentó resolver el enigma.
Este caso lo utilicé en 2023 para analizar el comportamiento de ChatGPT (versión 4.0), haciéndole responder de forma documentada a las 7 preguntas fundamentales de la criminalística: 1) ¿qué?, 2) ¿cómo?, 3) ¿dónde?, 4) ¿cuándo?, 5) ¿con qué?, 6) ¿quién o quiénes?, y 7) ¿por qué? En esta ocasión, me he centrado en la sexta pregunta, en este caso, ¿quién lo hizo?.
Del 2 de febrero de 2024 al 2 de febrero de 2025, hemos publicado 18 ediciones del Armorial de los Commoners de la International Society of Commoners Heraldry, siendo la última la más completa, con 286 páginas que incluyen 418 escudos de armas para personas y 9 para entidades, 95 insignias heráldicas, 70 estandartes, 31 banderas, 317 blasones escritos, 72 artistas heráldicos, 37 heraldistas, 48 jurisdicciones heráldicas, 43 autoridades, certificadores y registros citados, así como 211 certificaciones emitidas para personas y 8 para entidades.
Ver el Catálogo de Formación del INCIBE de 2024, páginas 12 y 17
Coat of arms of Ralf Hartemink, founder and owner of Heraldry of the World, crafted in wood with a height of 60 cm by woodflag.eu, based on my painting of his coat of arms. Since 1995, Heraldry of the World is the most important resource for civic heraldry.
Visitar Heraldry of the World - Heraldry-wiki
Visitar WoodFlag.eu/
Muchas gracias a la Genealogical Society of Ireland, por haber referenciado en la página 4 de la Ireland's Genealogical Gazette, volumen 20, número 1, mi libro titulado «Interpretación de seis blasones gentilicios de las Indias Meridionales concedidos entre 1538 y 1540», que he presentado al Society's Archive & Research Centre.
En el artículo de Don Francisco Domingo Larrosa Gil, «Esclarecimiento de Heráldica Eclesiástica y nombre completo del Cardenal Belluga y Moncada y del escudo radicado en la antigua Casa de Administración de sus Pías Fundaciones en Dolores (Alicante)», Revista GeoGraphos, Volumen 15, Número 1, páginas 1-35, Universidad de Alicante, Alicante, 2024, me cita en la página 28 como el «Autor de la delineación (imagen de la derecha), Antonio Salmerón Cabañas», y le estoy muy agradecido.
Es un honor formar parte de los artistas heráldicos destacados en The Armorial Register, compartiendo este espacio con otros colegas de renombre. Mi obra heráldica ahora está expuesta en la página de Featured Heraldic Artists, un reflejo de años de dedicación y pasión por la heráldica. Gracias, Martin Goldstraw, por este reconocimiento y por la oportunidad de compartir mis creaciones con una audiencia global.